Ayer de besos
Después de un par de décadas de no verse y con un objetivo inconfesable, se reencuentran tres viejos amigos: un triunfador nato, un músico que sobrevive combinando su arte con trabajos temporales u otros oficios variopintos, y un “ángel” del asfalto madrileño. Durante sus años mozos su música y la juventud les abrían algunas puertas y algunas piernas. Entre ellas las de Raquel.
Este artificio teatral se cuece con suspense, humor y música en directo. Mientras, podremos constatar que en este cuarteto alguien es un impostor, o impostora. Esta persona supone que su engaño no tiene fisuras, pero en realidad todos saben de qué color es su mentira. Pero… A estas alturas de la “comedia”, en esta constelación y con la música y la amistad de por medio hay cosas más importantes que la verdad.